− (Versión Original).
"Entonces el pueblo gritó
y sonaron las trompetas.
En ese preciso momento se
derrumbaron las Murallas
de la ciudad. Y así,
cada uno avanzó sobre
la parte de la ciudad
que tenían en frente,
dándose cuenta de que el
enemigo jamás existió.
Y fue así como se
apoderaron de Jericó
y de la Tierra Prometida."
____________________________ Josué 6:20.
Mucho tiempo ha pasado ya , en le que Tú,
Altísimo entre los Altos, Soberano de Soberanos
y Príncipe de los dioses, concediste el favor
a tu pueblo y nos trajiste hasta aquí.
_Extinto tu patriarca y profeta, el Mosahía de
nuestra Nación, inspiraste el glorioso caudillo,
que nos condujo a través del Jordán. El valeroso
guerrero condujo a nuestro pueblo a las murallas
de Jericó. Mientras nuestra gente entonó cantos
y glorificó tu nombre, los santos sacerdotes de
Israel te ensalzaron para la eternidad y tocando
las trompetas visualizaron tu gloria mientras las
murallas de Jericó se hacían añicos ante sus
extasiadas miradas, y pudieron ver que los
ejércitos enemigos se había extinto, o que realmente
nunca existieron.
_Entonces enseñaste a mi pueblo una importante
lección y nos hiciste místicos exaltándonos nuestros
ancestros pudieron contemplar tu gloria ¡Oh Cuan Santo,
Santo, Santo de Israel! Por eso hoy, Yo, Daniel,
Sumo Sacerdote tuyo, por la Gracia, por la Unción
y por el Pacto, vengo aquí a tu santuario a elevar
esta oración.
_Esta tarde, será una tarde diferente, los sacerdotes
y los ancianos acordamos no derramar más Santa Sangre
el día de hoy, ni sacrificarte el buey blanco castrado
que nos exige la Ley. Hoy no vengo ante ti a inmolar
cordero alguno, ni a ofrendar ante tu altar producto
animal alguno, hoy tu pueblo no ha excretado sus pecados
en chivos expiatorios ni soltado démones en el desierto.
_Hoy, el día del Aniversario de la Caída de los Muros
de Jericó, vengo ante ti, haciendo uso de mi dignidad
de Hierofante de la orden de Melkchisedek, a extender
la oración de tu pueblo, para llenarnos de Luz y de
Espíritu.
_Aquí, de pie ante tu santuario, de frente al Sanctísimo,
develo tu nicho, con los reyes, jueces, patriarcas, profetas
ambas órdenes sacerdotales, embajadores y sacerdotes
extranjeros, y teniendo a nuestro pueblo a mis espaldas
esperamos que te sea grata nuestra ofrenda de inciensos
perfumados los cuales elevarán nuestras oraciones hasta
tu Santo Templo Celestial.
――En esos momentos, en los que el Sumo Sacerdote retiró
los velos, continuó diciendo...―― Y entonces pues, ¡Oh
Sublime, Oh Soberano, Oh Gran Constructor, Oh Gran Arquitecto,
Oh Espíritu Infinito, Oh Mente Universal, Oh Eterno: Adonaí
Adonaí, Adonaí.
――Y una vez más, tras pronunciar las Santas Palabras el
Sacerdote dándo las gracias por la fe que les fue concedida,
alabó a lo alto por el milagro que les fue otorgado.
☠Dom Drako-Konztantyno ╬ ╬.∙.
POR EL IMPERIO DEL LAS "COSAS RARAS"
http://drako-konztantyno.blogspot.com/
Drako.Konztantyno@gmail.com
martes, 10 de noviembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario